DE TRANQUIS.

Sanur (Sur de Bali), dia 29.

Tenemos bien merecido un descanso y por ello estos dias que nos quedan vamos a seguir tomandonoslos con tranquilidad. Aqui en Bali no se pueden hacer las cosas de otro modo. El hotel que tenemos aqui en Sanur y en el que vamos a estar 8 dias es una pasada y esta de lujo. Habitacion espaciosa, limpisima, con aire acondicionado y tele, aunque solo con canales locales y reducida retransmision de los JJOO, piscinita de guays en la puerta de la pieza,  playita a cuatro pasos, parada de bemos justo enfrente, y restaurantes, Mc Donalds, y Dunkin a unos metrillos. No se puede pedir mas. Ademas nos ha salido a muy buen precio por haberla reservado en internet, aunque las habitaciones cuestan en realidad un ojo de la cara, asi que al fin vamos a poder olvidarnos de las malas experiencias del Pudu de KL y el Atlantico de Djakarta. Asi que nada, a disfrutarlo.

La cosa es que estamos en Sanur, un la zona este de la punta sur de la isla de Bali. Sanur, comparado con Denpasar, en la zona centro y capital de la isla, o Kuta, al oeste y zona turistica por excelencia a lo Lloret, pues es demasiado tranquilo. Asi que despues de dar unos rulos por la zona y ver que habia poco que hacer, hemos decidido pillar unas motos para poder movernos por todo el area, sobre todo por Kuta y Seminyak, las zonas con mejores playas y mas ofertas de ocio. 

Hemos llegado a Kuta Beach a mediodia y eso era una locura. Gente por todos lados, sobre todo surfistas o penya que va de surfista, muchos australianos pelo principe de bequelar, chicas Roxy, motos con portatablas, restaurantes y bares cerveceros para turistas, puestecillos de masaje, vendedores de todo en cada esquina, y tiendas... muchiiiisimas tiendas.

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MARTES 12 DE AGOSTO DE 2008
CAMINO AL SUR.
Anturan (Norte de Bali) - Sanur (Sur de Bali), dia 28.

La verdad es que madrugar hoy no ha valido demasiado la pena. A las 5 ya nos arreglabamos para poder ir a ver los delfines, una de las mayores atracciones de la zona de Lovina. Sobre las 6 una embarcacion se acercaba a la playa abriendose paso entre la nieblina matinal y las ultimas tinieblas (esto parece el Senyor de los Anillos) de la profunda noche... uuuuuu!!!! Hemos estado un buen rato navegando en una de esas barcas de pescadores, canoas muy estrechas a decir verdad que tienen a cada lado un par de "alas" de bambu que las estabilizan y las mantienen a flote y en la popa un motor japones que no para de tronar.

El mar era una piscina pero conforme amanecia hemos empezadoa escuchar mas y mas motores y a ver cada vez mas barquitas como la nuestra llenas de turistas somnolientos. Nos hacia ilusion ver a los delfines en su medio natural salvaje y ya que estabamos en Lovina pues hemos aprovechado. Pero a medida que avanzavamos la cosa me iba gustando menos. Los delfines no aparecian y las barcas no paraban de dar vueltas para todos lados en busca de ellos. Asi me parece neormal que los pobres animales no quieran salir. La idea que yo tenia acerca del avistamiento de delfines era otra muy distinta y constistia en ir en la barca hasta algun lugar especifico, y ale a esperar a que salieran. La realidad ha sido otra distinta y muy negativa, pues creo que el interes turistico esta perjudicando seriamente a la biodiversidad marina de esta zona. Al final, obviamente pues deben respirar de vez en cuando, han empezado a salir dorsales y lomos de delfines por aqui y por alla. Bastantes y muy guapos, es cierto, pero el mal gusto por la situacion que vivia ha hecho que no disfrutara de los simpaticos animalillos. Se les molesta, no se les deja cazar y comer en paz, y ademas se contamina su medio. No siempre se puede hablar bien de todo, aunque estemos de vacaciones y todo deba parecernos ideal. Punto negativo para el equipo de Lovina.

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